El Córdoba se hace con la tercera victoria consecutiva y con la primera a domicilio en el Municipal de Barreiro contra el Celta de Vigo B.

Germán Crespo y los suyos siguen aumentando el buen inicio liguero en un partido sencillo y bastante inteligente por parte del club califa. Enfrente han tenido a un Celta B fiel a sus ideas; queriendo jugar siempre desde atrás y sin rifar ningún balón. Esto le ha perjudicado en algunos tramos del partido a los de Claudio Giráldez ya que han recibido una presión muy asfixiante y organizada de los blanquiverdes.

Desde el primer momento del encuentro, los andaluces consiguieron hacerse dueños de la posesión y encerrar en su propio campo a un Celta B nervioso con el balón en los pies.

En el minuto 27 llegaba una ocasión de peligro muy clara para los visitantes. El Córdoba ahogó al contrario en campo rival para acabar robando y estrellando al poste un disparo de Kike Márquez.

Minutos más tarde llegó el gol que estrenó el electrónico, los califas aprovecharon el balón parado para que Willy Ledesma, tras una falta lateral botada por Kike Márquez, mandara el cuero al fondo de las mallas.

El Córdoba siguió apretando pero no consiguió aumentar la distancia antes del descanso. Tras el intermedio el conjunto vigués salió reforzado con los cambios. Se veía un equipo más atrevido, no tan nervioso con balón e incomodando más a los visitantes en su propio campo. Aún así, no llegaron con demasiado peligro a la portería defendida por Carlos Marín.

En el 60, el Córdoba aumentaba las diferencias a través de un pepinazo de Kike Márquez desde la frontal del área tras un buen eslalon de Carracedo por banda derecha. Segundo gol consecutivo en liga del de Sanlúcar de Barrameda.

Al rato, Adrián fuentes nada mas ingresar en el terreno de juego impactó el esférico al palo después de probar fortuna desde lejos.

El Celta B iba a meterse en el partido en el 89 recortando distancias tras un buen cabezazo de Lautaro desde el punto de penalti imposible para Carlos Marín, pero ya iba a ser demasiado tarde y no le daría tiempo a los gallegos a empatar el encuentro.

Finalizó un partido donde el Córdoba fue claramente superior a un rival que le costó mucho llegar a zona de peligro y falló en exceso en la salida de balón.

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