Los mejores jugadores de baloncesto son, en su inmensa mayoría, estadounidenses. Son los reyes de la pelota naranja, y lo han demostrado a lo largo del tiempo, llevándose el oro olímpico desde que la selección de EEUU se compone de jugadores profesionales, excepto en Atenas 2004. Pero en ocasiones son otros lugares del mundo los que se convierten en testigos del nacimiento de jugadores legendarios. Hoy vamos a conocer al mejor jugador sudamericano de la historia, quien anunció su retirada hace apenas dos semanas. Hablamos de Manu Ginóbili.

Bahía Blanca, el lugar donde nació el mito:
En la calle Vergara, en Bahía Blanca (Buenos Aires, Argentina) nació y creció Manu Ginóbili (28 de julio de 1977), un pibe del que su madre dice que aprendió a botar el balón con apenas dos años. Y es que el baloncesto siempre estuvo presente en la casa de los Ginóbilis. El abuelo paterno fue uno de los fundadores del club Bahiense Junior, que luego se fusionó con Deportivo Norte y se convirtió en Bahiense Norte, institución en la que el padre de de Manu fue jugador, director técnico y presidente. Y el club donde los tres hermanos (Leandro, Sebastián y Emanuel) comenzaron a tirar a canasta.
Pero Manu era el más pequeño de los tres, y su primer gran revés se lo llevó cuando se quedó fuera del equipo de cadetes para el campeonato Provincial, debido a su baja estatura y a su físico de cristal. Tenía 15 años.
Un año después pegó el estirón y pasó a medir 1,94 metros. Aunque su físico seguía siendo tan frágil que le seguían llamando “El Flacucho”. ¿Qué cualidades tenía entonces para triunfar en el baloncesto de élite?

Manu Ginóbili Infancia
“Emanuel siempre peleó por aquello que buscaba” cuenta Raquel Maccari, su madre.
Y así fue como, a punto de cumplir la mayoría de edad, Manu Ginóbili se trasladó al Andino Sport Club de La Rioja (Argentina) para jugar la Liga Nacional.

Emperador Ginóbili:
Debutó el 23 de septiembre de 1995 en Mar del Plata, contra el Peñarol. En su primer año se convirtió en el jugador revelación de la Liga de Argentina. Su buena temporada le abrió las puertas del club de su ciudad, el Estudiantes de Bahía Blanca, en donde estuvo hasta 1998.
Un modesto equipo de la segunda división italiana se fijó en él. El Basket Viola Reggio Calabria y Manu unirían sus destinos para dos temporadas. Juntos lograron el ascenso, a la par que el nombre de Ginóbili empezaba a resonar más allá de Italia.
Se presentó al draft de la NBA en 1999, donde fue elegido en la 57ª posición por los San Antonio Spurs. Ginóbili decidió quedarse por un tiempo en Italia, ya que el todopoderoso Kinder Bolonia había mostrado interés en su fichaje.
En dos años Manu logró 2 copas de Italia, 1 liga italiana, 1 Euroliga, 1 MVP de la copa, 1 MVP de la liga y 1 MVP de las finales de la Euroliga.

Manu Ginobili Italia.jpg
En dos años Manu sometió a Europa.
Suficiente para entrar en la NBA.

Miembro del Big Three de los Spurs:
Cuando llegó a los Spurs se encontró con un joven Tony Parker, con un veterano David Robinson (que ya había anunciado que la 2002/03 sería su última campaña) y con su líder, Tim Duncan.
Las prestaciones de Ginóbili fueron aumentando progresivamente, hasta ser elegido para disputar el All-Star en 2005. Ese mismo año, logró anotar 48 puntos frente a los Suns, la mejor marca de su carrera (aquí tienen el resumen de ese partido: https://youtu.be/8uoGnzDLDAU). Volvió a ser llamado para el All-Star en 2011.
Manu, Parker y Duncan se convirtieron probablemente en el mejor Big Three de la historia: juntos han logrado 701 victorias (en segundo lugar se encuentran Bird, Parish y McHale con 540) y 4 anillos (en 2003, 2005, 2007 y 2014).
Y otro dato interesante: mientras defendió esta camiseta siempre se clasificó para la post-temporada.

Big Three Spurs

El Sexto hombre de los Spurs:
Según Gregg Popovich, entrenador de los Spurs, » Manu juega tan intenso que no puede hacerlo 10 minutos seguidos, tengo que dosificarlo en lapsos de 6 o 7 minutos.»
Es por eso que durante toda su carrera Ginóbili era siempre el primer revulsivo para calentar los partidos. En toda su carrera ha jugado 1057 partidos de temporada regular, siendo titular únicamente en 349. También ha jugado 218 partidos de playoff, siendo titular en 53.
Sin embargo solo ganó una vez el premio al mejor sexto hombre. Fue en 2008, tras promediar 19,5 puntos, 4,8 rebotes, 4,5 asistencias y 1,5 robos por partido.

Manudona:
Si han leído atentamente la introducción se acordarán que la selección estadounidense se ha proclamado siempre campeona olímpica desde que se compone de jugadores profesionales, excepto en Atenas 2004. Fueron derrotados en semifinales por la conocida como Generación Dorada.
Esa Generación Dorada era en realidad la selección argentina que a la postre se colgaría una merecidísima medalla de oro y se convertirían en los conquistadores del Olimpo. Manu Ginóbili promedió 19,4 puntos por partido y se proclamó MVP del torneo.
Aquí tienen el partido entero:
https://youtu.be/sh09e5PBzDo (parte 1)
https://youtu.be/AjBPUXJhEg8 (parte 2)
Lograron el mayor hito de la historia del baloncesto argentino. Fue tan grande lo que consiguieron que se comparó a Manu con Maradona, y el apodo salió solo: Manudona.

Manu Ginobili abanderado.jpg

Manu Ginóbili fue el abanderado de Argentina en los JJOO e Pekín 2008

El Eurostep, el legado de Ginóbili:
Manu Ginóbili popularizó un movimiento bautizado como Eurostep. En una encuesta realizada por NBA TV, este movimiento fue considerado como el mejor de la historia de la liga. La jugada característica de Manu consiste en inclinar el cuerpo hacía un costado con un paso largo, en forma de amague, para luego ir rápido hacia el lado contrario y definir con una bandeja.
Aquí tienen un video explicado por él mismo: https://youtu.be/QDbqFYn38ao
Y finalmente les resumiremos sus estadísticas en temporada regular dentro de la franquicia:
– Puntos: 14.043 (5º)
-Rebotes: 3.697 (3º)
-Asistencias: 4.001 (4º)
-Robos: 1.392 (1º)
-Partidos jugados: 1.057 (3º)
-Minutos jugados: 26.850 (4º)
-Triples anotados: 1.495 (1º)
Y aquí están sus estadísticas en playoff:
-Puntos: 3.054 (3º)
-Rebotes: 874 (3º)
-Asistencias: 827 (2º)
-Robos: 292 (1º)
-Partidos jugados: 218 (3º)
-Minutos jugados: 6.075 (3º)
-Triples anotados: 324 (1º)

Su carta de despedida:

Manu Ginobili retirada.jpg

Manu Ginóbili anuncia su retirada a través de su cuenta de Twitter


Como buena costumbre en los grandes jugadores, tras su retirada hacen pública una carta donde intentan definir sus sensaciones a lo largo de su vida. Aquí se la dejamos:

Me siento a escribir, como dije en el tuit del anuncio de mi retiro, con una gran mezcla de sensaciones. Muy entusiasmado por la decisión tomada y por lo que se viene, pero también con bastante incertidumbre de no saber cómo me adaptaré al día a día sin pensar en el próximo partido. Es que hice solamente esto durante toda mi adultez. Desde los 18 que me fui a La Rioja y no paré de jugar hasta hace un par de meses. Va a ser raro, sin dudas, pero creo que estoy bien preparado y muy, pero muy bien acompañado para afrontarlo.
Además, tampoco puedo decir que fue una decisión apurada o inesperada. Tengo 41 años, lo estiré bastante el temita este del básquet ¿No? No sólo eso, en mi cabeza, la temporada pasada fue en todo momento “la última”. Nunca lo exterioricé porque no tenía ningún sentido limitar mis opciones, quería dejar la puerta abierta por las dudas que cambiara de idea o que siguiera sintiendo la fuerza física y mental que se necesita para afrontar una temporada de este estilo.
Al terminar la temporada dejé, como era habitual, pasar un mes o dos para ver cómo me sentía y en una reunión antes de viajar a Canadá de vacaciones, le dije a Pop que me veía más afuera que adentro, pero que nos íbamos a mantener en contacto y que hablábamos a mi regreso. Durante nuestras vacaciones, hablamos bastante con Many sobre la concreta posibilidad que esta vez sí fuera la vencida, pero nunca nos animábamos a confirmarlo ni creerlo del todo. Es que seguía queriendo dejar esa opción en caso que al volver a San Antonio algo me despertara el deseo de seguir y me volviera a llamar hacia la cancha, pero pasó lo contrario. Regresé y me puse a hacer pesas, agarré la pelota, miré a los más jóvenes entrenarse y romperse el lomo para estar bien para la pretemporada y a mí, sin embargo, todavía me dolían los últimos dos golpes de la temporada anterior. De a poquito me fui convenciendo de la decisión a tomar.
De todos modos tuve que esperar unos días a que Pop volviera de su viaje a Europa, porque quería que fuese él el primero en saberlo y el primero con quien charlarlo.
Este 27 de agosto me tocó el momento de hacerlo público. No se imaginan la tensión que pasé frente a la computadora antes de apretar “Enter”. No estoy seguro por qué, ya que estaba convencido de lo que tenía que hacer y que era la decisión correcta, pero fue muy loco. Estoy convencido y feliz del paso que di. Es difícil de explicar todo lo que sentí. Inmediatamente después experimenté un gran alivio y pensé que me iba a poder desconectar, pero empezaron a llegar los mensajes y no pude evitarlo. Algunos realmente me emocionaron. en realidad, nos emocionaron, porque Many, mi mujer está en la misma que yo. Ella también se retira y está viviendo lo mismo. Es que con Many viví 21 de estos 23 años, sufrió con todos los campeonatos, festejó, lloró, gritó, los vio desde lejos, de cerca, se bancó hasta dos meses que yo estuviera fuera de casa durante campeonatos con la selección, cuando podrían haber sido momentos de vacaciones familiares y miles de cosas más. Se hizo cargo de la casa en todos esos momentos, de los nenes, de que no me despertaran antes de un partido importante. Además mi apoyo moral después de las derrotas dolorosas y la compañera de festejos de muchas victorias. En fin, la lista continuaría un par de páginas más.
No debo ser el único que vive y siente todo esto al retirarse, supongo que debe pasar en todo ambiente laboral, solo que en el basquet tener esta familiaridad que logramos en San Antonio es muy poco habitual. Jugar con varios compañeros por casi 16 años, con el mismo entrenador y ver muchas de las mismas caras todos los años genera un sentido de pertenencia muy fuerte. No quiero entrar a nombrar gente porque seguro que terminaría siendo injusto con varios. Lo dije en mi tuit, inmensamente agradecido con todos.
Lo que le dejé en claro a Pop es que no es un “chau, me voy”. Mis hijos ya empezaron las clases y mientras esté en la ciudad voy a estar cerca del equipo y de la franquicia, tal vez no pueda ayudar más sacando una falta en ataque o con algún robo o algo, pero trataré de sumar en lo que pueda, tengo un gran aprecio por mis compañeros, por el staff y toda la gente del equipo y quiero que le vaya lo mejor posible. Si puedo ayudar desde afuera, lo haré con mucho gusto.
También puedo decir que no me quedé con las ganas de nada, jugué hasta que tuve ganas, algunos se tiene que retirar por lesiones o demás cuestiones antes de tiempo, pero yo jugué hasta pasados los 40 años. La verdad es que no me quedó nada pendiente. Es más, me di el gustito en los últimos tres años de jugar como uno quisiera hacerlo con sus amigos, sin sentir la presión de ser el responsables exclusivo de lo que pueda suceder, con la sensación de ‘yo ya di todo lo que pude’. Jugué porque me gustó hacerlo, por mi respeto y aprecio al lugar en el que estaba. Y agradecí de la forma en la que pude en mi tuit, porque es mucha con la gente que compartí a lo largo de este camino. Una de las mejores cosas que me llevo es que con todos los compañeros con los que jugué, son 254, nunca tuve una pelea y lo mismo con los entrenadores. No tuve tantos, está claro, pero con los 9 técnicos que trabajé me llevé bárbaro, con aprecio y respeto por el trabajo mutuo. Pero también hay mucha gente que no está en primera plana y que se rompe el lomo para que nosotros estemos en condiciones de jugar. Insisto, no salen en los titulares ni son tan reconocidos, pero son fundamentales para cualquier organización.
Además es importante reconocer que me convertí en el jugador que fui cuando pasé por Europa. Más allá de los éxitos deportivos que tuve en Bologna o lo que crecí en Reggio Calabria, todo lo que me tocó aprender allí me sirvió para después poder competir al más alto nivel en la NBA.
Todo fue especial en mi carrera porque no es común estar tanto tiempo en un equipo de la misma manera que no se dan procesos en selección en los que un puñado de jugadores compartan con casi 20 años juntos, con Spurs y la Generación Dorada. Tuve la fortuna de formar parte de dos grupos que han tenido una relevancia increíble en el deporte y en todos los casos encontré una calidad humana imposible de igualar. A nivel profesional haber tenido esa posibilidad es sin duda asombroso.
Y a los aficionados también les digo gracias porque me adoptaron desde el primer día. Entiendo que deben haber ayudado mis orígenes latinos y mi español, lo que colaboró para mi vínculo con la gente y eso me permitió una conexión única durante 16 años, con un afecto especial y un respaldo incondicional. Y con respecto a los hinchas argentinos, la verdad es que no tengo palabras, lo que vivimos, por ejemplo en Mar del Plata y en Río de Janeiro, será muy difícil de olvidar. Las emociones que viví con la selección no son fáciles de explicar en un par de líneas. Y lo que me tocó profundamente fue mi último partido en los Juegos de Río 2016. Fue una muestra de cariño impactante. Además, ver en los últimos años el paso constante de los argentinos por San Antonio para verme jugar fue sencillamente increíble. Sé de los esfuerzos que hacían por estar y eso conmueve.
Y bueno, ahora comenzará el momento de pasar más tiempo con mi mujer y con mis hijos. De disfrutar tiempo de calidad en la Argentina con mi familia y amigos. De comer la polenta a la tabla de mi viejo y los asados con amigos. De pasar la segunda mitad de mi vida con mucho menos responsabilidades y sin exponer tanto mi cuerpo, que es el único que tengo. En definitiva, voy disfrutar de tener tiempo disponible, porque es lo que todo el mundo persigue y yo ahora lo tengo a los 41 años. Gracias a todos por apoyarme en este largo viaje.

Más info:
Sobre otros jugadores de los Spurs: Tim Duncan, Robert Horry
Sobre otros veteranos: https://mundonogomet.com/2018/05/17/los-yayos-del-2018/
Sobre otros apodos de jugadores: https://mundonogomet.com/2018/08/25/nombres-para-toda-una-vida-los-mejores-motes-de-la-nba/

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